Un grupo de investigación de la Universidad de Córdoba lleva más de 20 años estudiando cómo la fresa se defiende de los patógenos que la atacan.
Con su último trabajo han avanzado mucho en esta tarea. Han conseguido identificar los genes responsables de esa defensa.
Esta familia de genes se llama VQ. Los genes VQ activan o bloquean los genes encargados de responder al estrés que producen los patógenos.
La revista Scientific Reports ha publicado este estudio. Con esos datos, otros científicos podrán mejorar las plantas de fresa y hacerlas más fuertes. Si lo consiguen, este trabajo tendrá un efecto inmediato sobre la economía, ya que España es el principal productor europeo de fresas.