Una nueva investigación de la Universidad de Córdoba ha empleado inteligencia artificial para diagnosticar el grado de parkinson.
La mayoría de los diagnósticos actuales sólo distinguen si el paciente padece o no esta enfermedad.
El nuevo trabajo permite distinguir la fase en la que se encuentra la enfermedad.
La investigación emplea imágenes en tres dimensiones de la zona del cerebro afectada.
Las imágenes pertenecen a pacientes con síntomas compatibles con esta enfermedad.
Los resultados podrían ayudar a mejorar los tratamientos para combatir el parkinson.
Conocer la fase en la que se encuentra la enfermedad permite ajustar mejor la dosis de los medicamentos.