El plástico puede tardar cientos de años en descomponerse y se acumula en los ecosistemas.
Su uso excesivo puede suponer un problema para el medio ambiente.
Por ello la comunidad científica está buscando otros materiales más sostenibles.
Una investigación ha conseguido sustituir parcialmente el plástico en envases alimentarios.
En su lugar utiliza las fibras de las hojas y ramas del árbol del aguacate.
El trabajo ha creado un prototipo de material a partir de estos residuos.
Este nuevo material es más sostenible y resistente.
Esto quiere decir que es más difícil que se rompa.
El próximo paso será evaluar la rentabilidad económica de este nuevo material.