Hablar de ganadería extensiva es hablar de equilibrio y conservación en los ecosistemas donde se practica. Se trata de un sistema que, dentro de sus diversas variantes, intenta producir de modo sostenible en terrenos que casi no admiten otra forma de producción y en los que los animales se alimentan en grandes extensiones de los propios recursos que ofrece el medio. La ganadería extensiva favorece la biodiversidad, fija la población, produce alimentos de alto valor añadido, fija el carbono en el suelo y previene incendios, por lo que sus beneficios van más allá de la obtención de productos cárnico. Para una sostenibilidad total, solo le falta una mayor rentabilidad con una mejor comercialización y diferenciación de sus productos.
A pesar de su relevancia social, actualmente la ganadería extensiva atraviesa una dura crisis, especialmente en el sur de Europa, donde algunos de los efectos del cambio climático se están manifestando de forma más contundente. El aumento de la aridez, por la escasez de precipitaciones y el aumento de las temperaturas, reduce la producción de los pastos, la clave de la alimentación de la ganadería extensiva y que solo tiene valor como recurso cuando es pastoreado. Con menos pastos, se debilita este sistema, se reduce su productividad y aumentan sus costes.
El proyecto internacional Live Adapt – ‘Adaptation to Climate Change of Extensive Livestock Production Models in Europe’- (LIFE17 CCA/ES/000035), tiene como objetivo adaptar la ganadería extensiva al cambio climático mediante tecnologías y prácticas innovadoras que permitan la adaptación del sector a este problemático escenario. El equipo multidisciplinar, coordinado por investigador del Departamento de Producción Animal de la UCO Vicente Rodríguez Estévez, está integrado por instituciones de Francia, España y Portugal y se enmarca en el programa ‘LIFE17 Climate Change Adaptation’ de la Unión Europea, instrumento que apoya la conservación medioambiental y los proyectos de acción climática.
Si bien la Universidad de Córdoba coordina todo el proyecto, que ahora atraviesa su ecuador, también lidera algunos paquetes de trabajo específicos. Concretamente, la institución universitaria está llevando a cabo evaluaciones de la productividad de los pastos, las prevalencias de los parásitos y el estado de las poblaciones de fauna coprófaga, así como unos ensayos de mejora de pastos con leguminosas de ciclo corto y tratamientos antiparasitarios alternativos. A todo ello se suma la propuesta de nuevos modelos de negocio y de políticas de apoyo a la ganadería extensiva, que permitan poner en valor su papel conservador del medio ambiente y mitigador del cambio climático, para mejorar la viabilidad económica de estos sistemas; también con el apoyo de las innovaciones desarrolladas por el equipo, como una aplicación APP para la gestión de las explotaciones. En definitiva, se trata de reforzar la sostenibilidad de unas producciones ganaderas que benefician a toda la sociedad, se sea o no se sea consumidor de sus productos.
El proyecto, en el que participan ocho socios, está identificando las necesidades del sector y buscando las mejores prácticas de adaptación al cambio climático, innovando algunas de las ya existentes. Algunas de las acciones del proyecto van encaminadas a mejoras tecnológicas para un mejor aprovechamiento del agua, con sistemas para el aprovisionamiento de agua, reducir su evaporación y su mejor aprovechamiento, o el diseño de herramientas de gestión de las explotaciones a partir de información on line de la propia explotación, de SIGs y de bases de datos meteorológicas, que ayudarán tanto en la toma de decisiones como en las previsiones. Otras acciones tienen el objetivo de mejorar el equilibrio de los pastizales y aumentar su capacidad de fijación de carbono.
La formación, clave para la sostenibilidad
Tras una primera fase de identificación de buenas prácticas, los distintos equipos están elaborando una serie de fichas técnicas para dar a conocer las diferentes medidas que permiten adaptar las explotaciones extensivas al cambio climático. Las fichas abarcan varias temáticas, que van desde el aprovechamiento de la vegetación al manejo del ganado en pastoreo, pasando por la gestión del agua y los tratamientos antiparasitarios. Estas fichas de buenas prácticas serán la base para el desarrollo de un curso MOOC que la Universidad de Córdoba alojará en su Aula Virtual con la plataforma Moodle. Este programa formativo se pondrá en marcha durante los últimos meses del proyecto a partir de cinco cursos que comenzarán a desarrollarse en enero de 2021. Estos contarán con distintos niveles de dificultad y contarán con la tutorización del personal técnico de este proyecto Life.
Con el objetivo de que los resultados incidan en las políticas agrarias, tanto para el apoyo de las prácticas como para una mayor consideración de la ganadería extensiva, todas las mejoras se transferirán a través de informes, talleres, reuniones, la web del proyecto y las mencionadas acciones formativas.
El proyecto LIVE ADAPT “Adaptation to Climate Change of Extensive Livestock Production Models in Europe” (LIFE17 CCA/ES/000035) está cofinanciado por la Unión Europea a través de la convocatoria LIFE 2017 CCA y por la Universidad de Córdoba.
Este reportaje es parte de la estrategia de comunicación de la Oficina de Proyectos Internacionales para divulgar los proyectos internacionales concedidos a la Universidad de Córdoba.