La física de lo grande y lo pequeño a combate
Los investigadores del Departamento de Física de la Universidad de Córdoba acercaron la física a la cotidianidad del público asistente a El Astronauta
Si el Premio Nobel de Física que paseaba por Córdoba la semana pasada, Gerardt’ Hooft hubiese permanecido en la ciudad, habría asistido expectante al combate que se libró ayer en el restaurante El Astronauta bajo el neón de ‘La física de lo grande y lo pequeño’.
A las 19.00h los protagonistas ocupaban el cuadrilátero ante una sala abarrotada en la que, de haber taquilla, habría sido un sold out en toda regla. De la mano de un promotor común, el grupo de Modelización y Simulación de Sistemas Físicos (FQM-378) del Departamento de Física de la UCO, Antonio J. Cuesta con ‘la física de lo grande’ y Enrique Fernández Borja con ‘la física de lo pequeño’ comenzaron un primer round en el que jugaron con las mejores leyes de sus campos para explicar la naturaleza sobre la que todo se asienta.
El astrofísico Ángel R. López-Sánchez imparte una clase práctica de observación de las estrellas desde Córdoba a los alumnos del Campus de Investigación de la UCO
El divulgador científico cordobés trabaja en Sidney (Australia) y es miembro de Foro Único, la iniciativa del Consejo Social de la Universidad de Córdoba para elaborar un ‘mapa del talento’ cordobés repartido por el mundo
El astrofísico y divulgador científico cordobés Ángel R. López-Sánchez impartió anoche una singular clase práctica de observación de las estrellas desde Córdoba a los 58 alumnos del Campus de Investigación de la Universidad cordobesa, que se inauguró este lunes y que cuenta con la colaboración del Consejo Social de la UCO.
La fuerza que acelera la expansión del universo cambia con el tiempo
Un estudio internacional, publicado en Nature Astronomy y en el que participa un profesor de la UCO, revela que las propiedades que caracterizan a la misteriosa energía oscura han variado a lo largo de la historia
Algunos la llaman el motor del universo debido a que es la responsable de que el cosmos se expanda cada vez más rápido. Se la conoce como energía oscura y, a pesar de que representa casi tres cuartas partes de la composición del universo, poco se sabe de ella. Su hallazgo les valió el premio Nobel a sus descubridores hace seis años y, desde entonces, la comunidad científica no ha cesado en el empeño de descifrar su naturaleza. No en vano, detrás de sus secretos podrían esconderse pistas importantes sobre el origen y el destino del cosmos.