Un convenio de colaboración entre el Patronato de la Alhambra y el Generafile y la Universidad de Córdoba permite la recuperación de uno de los cultivos más antiguos de la humanidad


Se trata de uno de los cultivos más antiguos de la humanidad y una especia de gran importancia en el Al-Andalus. El azafrán, originario del sudeste asiático y el extremo oriental del Mediterráneo, tiene múltiples aplicaciones en cosmética y gastronomía y destaca por sus propiedades medicinales. Desde hace unos días, 80 kilos de bulbos de esta joya color granate crecen en las huertas medievales del Generalife gracias a un convenio de colaboración entre el Patronato de la Alhambra y la Universidad de Córdoba (UCO) y en el que también participa el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Azafrán de la Mancha.