Se trata de una tesis pionera, puesto que se enfoca en una patología grave pero poco frecuente, los tumores neuroendocrinos, y también por haberse realizado desde el IMIBIC pero a través de una muy estrecha colaboración entre las dos universidades, Cordoba y Rotterdam, y sus correspondientes hospitales universitarios, el Reina Sofía y el Erasmus Medical Center. La investigación de la doctora Herrera se ha centrado en la identificación de nuevos marcadores diagnósticos y opciones terapéuticas en tumores neuroendocrinos, combinando análisis clínico-moleculares en pacientes con carcinoides pulmonares y tumores digestivos (gastroenteropancreáticos) y estudios experimentales en el laboratorio, donde ha evaluado el efecto de nuevos tratamientos, así como de medicamentos previamente aprobados con otros fines, para el control del crecimiento tumoral y la secreción hormonal de estos tumores.