Ante la amenaza de una especie extraterrestre de insectos, un niño es entrenado en una escuela militar para ser el líder de una futura guerra. Es el argumento principal de “El Juego de Ender” de Orson Scott Card, la novela protagonista en la primera sesión de la VIII edición de ‘Cienciaficcionados’ que ayer reunió a unas 40 personas en el restaurante El Astronauta. En esta ocasión, José Hernández Ascanio y Jaime Ajá, investigadores del área de Sociología de la Universidad de Córdoba, fueron los encargados de analizar en términos sociales el escenario que se dibuja en la novela.
El diálogo, moderado por la periodista Marta Jiménez, comenzó con un debate sobre el sistema educativo centralizado que se plantea en “El juego de Ender”, en el que los niños son segregados desde muy jóvenes en función de sus capacidades innatas. En la conversación, se planteó la importancia que tiene el sistema educativo en la configuración de la sociedad.
Por otra parte, también se destacó el machismo sutil que se detecta en “El juego de Ender”. El único personaje femenino de la historia se presenta como una persona hipersensible y empática con gran inteligencia pero incapaz para el liderazgo que en la novela se plantea como puramente masculino.
Uno de los temas más candentes durante la tertulia fue la polémica que rodea a la figura del autor, Orson Scott Card, que ha manifestado en numerosas ocasiones una ideología ultraderechista, machista y homófoba que también se deja intuir en su obra. En relación a esta cuestión, algunos de los asistentes intervinieron para señalar la necesidad de separar la obra del autor a la hora de analizar o disfrutar su producción ya sea científica, artística o literaria.
Para terminar, los investigadores conversaron acerca del muro que existe a veces entre la investigación tecnológica y la social. Las innovaciones que se producen a nivel tecnológico no sólo afectan a este ámbito, sino que también transforma la manera en la que una sociedad se organiza. Por esto, según los investigadores, es importante crear un diálogo más fluido entre las dos disciplinas científicas.
Cienciaficcionados tiene como objetivo la promoción de la cultura científica y de la innovación y se enmarca en los objetivos del VII Plan Anual de Divulgación Científica de la Universidad de Córdoba que coordina la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) del Ministerio de Ciencia e Innovación.